En su mejor momento, le pasó lo peor. El pibe Botta la rompió hace una semana contra Independiente, y todo Tigre se había ilusionado con que sus gambetas fortalecerían al equipo de tres cuartos de cancha hacia adelante.
Pero por un esguince en su tobillo izquierdo el volante se perderá una oportunidad única de ratificar lo que viene prometiendo, ya que no llegará en condiciones al domingo para enfrentar a Boca en Victoria. Por suerte para Caruso Lombardi, el uruguayo Choy González es una buena variante para el carril izquierdo.
De esta manera, el juvenil Ruben Botta se suma a los varios averiados del Matador: Maximiliano Oliva, con fractura de malar; y los desgarrados Juan Pablo Garat y Carlos Fondacaro, quienes ayer se entrenaron en forma diferenciada.
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